Los templos y palacios de esta ciudad maya presumen su majestuosa arquitectura, lucen imponentes, casi solitarios, ante los turistas que poco a poco se están animando a recorrer Yucatán, luego de seis meses de confinamiento.

Texto de Herbeth Escalante y fotografías de Lorenzo Hernández

Santa Elena, Yucatán, 30 de octubre de 2020.- Los templos y palacios mayas de la zona arqueológica de Uxmal presumen su majestuosa arquitectura, lucen imponentes, casi solitarios, ante los turistas que poco a poco se están animando a recorrer Yucatán, luego de seis meses de confinamiento por la pandemia.

Hace dos semanas que dicho sitio prehispánico, ubicado al sur de la entidad, abrió sus puertas de nuevo y de acuerdo con el Patronato Cultur, están recibiendo aproximadamente a 150 visitantes al día, cuando antes de la emergencia sanitaria eran mil.

Al ingresar, sorprende la solemne Pirámide del Advino, aquel edificio que, según la leyenda, un enano hechicero construyó en una sola noche para proclamarse gobernador de la urbe. Están llegando los turistas, por lo que un custodio del INAH se apresura a quitar la hierba que se “escapa” entre los escalones, sujetando su cuerpo con una acuerda aproximadamente a 60 metros de altura.

A la vuelta, en el Cuadrángulo de las Monjas, está una pareja admirando los mascarones de Chaac, el dios maya de la lluvia, que decoran las edificaciones. Aprovechan para tomarse fotografías teniendo como fondo ornamentos de serpientes de dos cabezas. 

Se trata de Mariana Martínez y Salvador Gallardo, originarios de Jalisco, quienes están de vacaciones para conocer algunas zonas arqueológicas de Yucatán y, por supuesto, les recomendaron mucho Uxmal. “No nos los imaginábamos que fuera tan grande y bonito, por supuesto que vamos a regresar”, comentaron.

También destacaron los protocolos de sanidad establecidos desde la entrada y durante el recorrido para evitar contagios de Covid-19, pero principalmente que todos cumplen con usar cubrebocas y respetan las normas de higiene.

Al respecto, el coordinador de la Unidad de Servicios de Uxmal, Ramón Lee Rejón, explicó que para guardar la sana distancia, se trazó una ruta que los visitantes tienen que seguir en el sitio, además de que en todo el recorrido hay dispositivos con gel para desinfectar las manos.

“Los grupos de turistas sólo pueden ser de 10 personas, para que no haya amontonamientos, y la visita no puede tardar más de dos horas”, recalcó. 

Un grupo de jóvenes se protege del implacable Sol debajo de un árbol, y mientras descansan, contemplan a lo lejos el Palacio de Gobernador, el edificio más bello de la época precolombina en Mesoámerica, el cual sobresale por su compleja decoración y el contraste de sus diseños.

“Desde la década de los 90 trabajamos en su restauración y mantenimiento, fue el lugar donde vivió Ah Uitzil Chaac (El Señor de de las Colinas), el último gobernante de Uxmal. Debajo de este basamento encontramos otro edificio, por lo que seguiremos con las investigaciones, las cuales tuvimos que parar por la pandemia”, comentó José Huchim Herrera, director de la zona arqueológica de Uxmal del INAH. 

El arqueólogo está enamorado de esta legendaria ciudad, la más importante de la Ruta Puuc, y desde donde se dominó a los pueblos mayas de la zona, como se puede constatar en los 350 vestigios ubicados a su alrededor. Se levantó en tierras fértiles, en donde más llueve en Yucatán.

“El único problema es que tenían el manto acuífero a 72 metros de profundidad, por eso los mayas diseñaron un complejo sistema hidráulico para embalsar el agua de la lluvia, como lagos artificiales y más de 200 chuntules (depósitos prehispánicos) dentro de la ciudad para uso doméstico y de las unidades habitacionales”, señaló.

En su época de apogeo, aproximadamente 35 mil personas vivían en Uxmal, quienes dejaron un importante legado al mundo con su Juego de Pelota, la Gran Pirámide o la Casa de las Tortugas,  entre otras, que no dejan de sorprender a quienes lo visitan.

El director del Patronato Cultur, Mauricio Díaz Montalvo, declaró que actualmente están preparando un proyecto de video mapping que, cuando las condiciones sanitarias lo permitan, estrenarán para atraer a más visitantes a Uxmal, que sin duda es un imán económico en esa zona de Yucatán.

Este atractivo sustituirá al espectáculo nocturno de luz y sonido, uno de los más importantes del país y que fue inaugurado por la reina Isabel II de Inglaterra en 1975. 

“Uxmal es uno de los principales sitios prehispánicos de nuestra entidad que todos los turistas quieren conocer, ya dimos el primer paso con la reapertura y vienen nuevos proyectos, claro, garantizando la salud y seguridad de quienes nos visitan”, sostuvo Díaz Montalvo. (Publicado también en El Heraldo de México)