Se utilizaría el ramal del Centro de Operaciones Ferroviarias para este proyecto, por lo que se evitarán daños al sitio arqueológico descubierto recientemente en Umán. 

Por Claudia Arriaga

Mérida, Yucatán, 22 de enero de 2020.- El delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Eduardo López Calzada, aseguró que la zona arqueológica bautizada como Panadero no sufrirá afectaciones con el Tren Maya, pues actualmente existe infraestructura ferroviaria en esa zona de Umán que sería utilizada para el trayecto.

El sitio, como informamos en exclusiva en Haz Ruido, se ubica a tan solo 1. 2 kilómetros del Centro de Operaciones Ferroviarias (COF) en la comisaría de Poxilá y las vías de ferrocarriles actuales atraviesan su plaza cívica-ceremonial.

Es probable que, con dicho megaproyecto del Gobierno de la República, se levante un área maniobras de carga y descarga de productos comerciales en ese punto, por donde está Panadero.

El funcionario federal recordó que, en 2016, la arqueóloga del INAH Lourdes Toscano, junto con su equipo de investigación, encontró los vestigios mayas cuando se realizaban los trabajos de construcción del mencionado Centro.  

López Calzada también dijo que, desde entonces, se garantizó que las nuevas vías del tren modificarán su trayecto para respetar el perímetro de conservación.

Asimismo, indicó que no sólo se garantizó la construcción del proyecto ferroviario, sino  que se conservaron los vestigios y se recuperó información cultural.

Ahora, al contar con esa infraestructura, es muy probable que sea utilizada para el Tren Maya, por lo que, recalcó, no se afectará a Panadero. Es decir, con el ramal de vías en ese sitio arqueológico, se anticiparon a la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador.

En ese sentido, señaló que el INAH acompañará las labores de construcción que la federación realice con el Tren en Yucatán y en el sureste del país, para que, en caso de encontrar grandes vestigios como Panadero, se planteen soluciones técnicas para no provocarles daños.

“Si es un asentamiento relevante, irrepetible, provocaremos algún tipo de solución técnica o ingenieril como librarlos de un costado o volar los salvamentos. Ante la duda si puede afectarse patrimonio, debemos prever no haya daño y sí exista una recuperación”, puntualizó.

López Calzada comparó los trabajos de rescate que realizarían durante las obras del Tren Maya con el programa de fachadas y remodelación del Centro Histórico de Mérida en 2011, en el que descubrieron puntas de flecha y otras reliquias mayas en la Plaza Grande.

“Se encontró detalles en los niveles originales de la plaza, tiestos, puntas de flecha y vestigios de épocas más recientes, como frascos de tinta, herrajes. Los registramos y hacemos rescates rápidos para no interrumpir el avance de la obra”, explicó.