Sigue el conflicto de las luminarias por la deuda de más de 588 millones de pesos. El Municipio volvió a plantear hacer el pago en parcialidades.

Por Redacción

Mérida, Yucatán, 26 de agosto de 2021.- Tras la deuda de más de 588 millones de pesos por el conflicto de las luminarias, el Ayuntamiento de Mérida aclaró que sus bienes y cuentas públicas son inembargables, por lo que ayer trató de llegar a un acuerdo con el Banco Santander para pagar a través de parcialidades.

Como se sabe, el Juzgado Segundo de Distrito de Yucatán fijó para ayer miércoles el embargo de cuentas bancarias y bienes del Municipio ante el incumplimiento de pago a esa institución bancaria desde 2011.

Al respecto, el Ayuntamiento informó que por la tarde se llevó a cabo una diligencia, en la cual presentó un plan de pagos, mismo que ya había sido planteado desde enero del 2019 y que se volvió a exhibir el 11 de agosto pasado, pero que había sido ignorado por autoridades judiciales.

En un comunicado, señaló que el Municipio cuenta con una prerrogativa para que, ante una obligación judicial pueda cumplir con la misma mediante el pago en parcialidades, a fin de no afectar los programas prioritarios y la debida prestación de los servicios públicos.

No obstante lo anterior, abundó,  Banco Santander intentó señalar bienes que por su naturaleza son inembargables, lo cual no puede producir efectos adversos al Municipio.

El Ayuntamiento recordó que los bienes y cuentas públicas son inembargables de acuerdo con los artículos 9 de la Ley de Coordinación Fiscal; 8 de la Ley de Coordinación Fiscal del Estado de Yucatán, así como 19, 21 y 22 de la Ley de Bienes del Estado de Yucatán; el 151 de la Ley de Gobierno de los Municipios del Estado de Yucatán y el 42 de la Ley de los Trabajadores al Servicio del Estado y Municipios de Yucatán.

Como se recordará, durante la administración de la priísta Angélica Araujo Lara se firmó un millonario contrato de arrendamiento de luminarias que se instalaron por toda la ciudad con la empresas AB&C Leasing, la cual posteriormente transmitió los derechos de esa renta a Santander.

Sin embargo, en el primer gobierno del alcalde panista Renán Barrera Concha se dejó de pagar la renta de las luminarias argumentando que hubieron irregularidades en el contrato y de que dicha infraestructura era de mala calidad.