Aldrin Briceño y su oscuro pasado llegan al Poder Judicial

Mientras decenas de trabajadores del Inaip se quedan sin trabajo, el excomisionado que los violentó laboralmente ahora fue nombrado secretario Ejecutivo del Consejo de la Judicatura por las nuevas autoridades judiciales.
Por Herbeth Escalante
Mérida, Yucatán, 19 de septiembre de 2025.- Mientras decenas de trabajadores del extinto Instituto Estatal de Transparencia (Inaip) se encuentran en la incertidumbre laboral porque no saben si serán recontratados o se quedarán sin trabajo, el antiguo comisionado presidente de ese organismo, Aldrin Briceño Conrado, quien se caracterizó por los malos tratos y vejaciones al personal, estrena alto puesto directivo en el Poder Judicial de Yucatán.
No queda claro si ayer se aprobó o pronto se aprobará el nombramiento de dicho sujeto como secretario ejecutivo del Consejo de la Judicatura, área administrativa del Poder Judicial. Le dieron un nuevo encargo sin importar sus antecedentes de acoso laboral, prepotencia y trato déspota.
Quienes lo conocen porque trabajaron con él en el Inaip, se preguntan si repetirá las mismas conductas violentas en contra de los servidores públicos del sistema judicial.
Es una ironía que mientras las nuevas autoridades judiciales han prometido que se acabará el clima hostil y las vejaciones en contra de las y los trabajadores, que caracterizó a la administración pasada ligada al PAN, ahora se atrevieron a contratar a alguien con un perfil como el de Aldrin Briceño.
En el Inaip se le recuerda por insultar, gritar, amenazar y maltratar a sus subordinados, e incluso por conductas inapropiadas en contra de las mujeres, por lo que no queda claro porque ahora el nuevo Poder Judicial, que según será cercano a la base trabajadora, haya reclutado a un personaje con este historial.
Dicho individuo también provocó serios problemas financieros al Inaip derivado de despidos injustificados de personas que durante años trabajaron ahí.
Por ejemplo, en abril del 2022, Haz Ruido documentó que el Inaip estaba obligado a erogar más de 700 mil pesos para pagarle a dos extrabajadores que promovieron demandas laborales. Se trató de diligencieros que Aldrin Briceño despidió bajo el argumento de que “estaban bien pagados”.
Además, durante su presidencia, desapareció una Dirección entera, la de Vinculación y Comunicación Social, dejando en la calle a seis personas. Asimismo corrió injustificadamente a los titulares de Tecnologías de la Información, y de la coordinación de Archivos.
Otro caso que causó enojo al interior del Inaip es que despidió a una trabajadora, a pesar de que sabía que estaba embarazada.
También hay acusaciones muy graves en su contra que en su momento fueron investigados por el departamento de Contraloría Interna, sobre supuestas agresiones que cometió.
Lo que sí queda claro es que con este nombramiento, las nuevas autoridades judiciales se contradicen en la promesa de que serían diferentes a las anteriores, quienes se caracterizaron por proteger a perpetradores de violencia laboral.








