Vecinos de Gran Santa Fe Norte denuncian rebosamiento de aguas negras

Acusan que la Japay no atiende los reportes pese al mal olor provocado por el desbordamiento de las alcantarillas. El intenso calor, sumado al tránsito vehicular, ha esparcido los residuos por la calle.
Por Itzel Chan
Mérida, Yucatán, 3 de junio de 2025.— Desde hace casi un mes, vecinos de la privada Cocoyoles, en el fraccionamiento Gran Santa Fe Norte, viven con malos olores y desbordamientos de aguas negras debido al rebosamiento de alcantarillas, sin que hasta el momento las autoridades brinden una solución efectiva.
De acuerdo con los testimonios recabados, la situación se reportó por primera vez hace tres semanas ante la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán (Japay), e incluso se han hecho múltiples reportes a la línea Ayuntatel. Sin embargo, la única respuesta que reciben es que el reporte “ya está registrado” y que “mañana van a su domicilio”, sin que se concrete la atención.
Aunque la mayor afectación directa proviene de una sola alcantarilla ubicada en la calle 15 entre 74A y 74B, los impactos se extienden a cerca de 80 familias. El intenso calor, sumado al tránsito vehicular, ha esparcido los residuos por la calle, generando un ambiente que las y los vecinos califican como insoportable.

“El olor se expande y cada auto que pasa empieza a esparcir las heces fecales… imagínate cómo está con el calor”, relató un vecino, quien también expresó su frustración porque las autoridades no dan seguimiento y en ocasiones incluso cuelgan las llamadas cuando se da seguimiento a los reportes.
La principal preocupación de los habitantes es que esta semana inicia la temporada de lluvias, lo que podría agravar la situación sanitaria al provocar escurrimientos contaminados que alcancen otras viviendas.
“Ya están saliendo olores de las alcantarillas interiores y empiezan a burbujear… acá viven muchos niños, y mientras esto siga, van a empezar las enfermedades, porque al final es excremento lo que sale”, advirtió otra vecina.
Además de los riesgos a la salud, los vecinos denuncian una creciente sensación de abandono. Han considerado acudir directamente a las oficinas centrales de Japay, pero también confían en que visibilizar el problema en medios de comunicación pueda ejercer mayor presión para obtener una pronta respuesta.
La comunidad afectada pide que se atienda de inmediato la problemática antes de que la situación derive en afectaciones mayores tanto para la salud pública como para el medio ambiente.