Investigador del INAH detectó que los hijos de estas personas en situación de vulnerabilidad son los que administran las tarjetas de los programas sociales y, en la mayoría de los casos, se quedan con todo el recurso.

Por Itzel Chan 

Mérida, Yucatán, 7 de diciembre de 2023.-En Yucatán se ha identificado que al menos 8 de cada 10 personas adultas mayores que cuentan con su tarjeta de Bienestar, no las administran directamente sino sus hijas e hijos y en la mayoría de los casos no reciben ni un peso de este beneficio gubernamental. 

En entrevista con el doctor investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), José Gamboa Cetina, quien ha trabajado en los últimos años temas relacionados con la situación que viven las personas adultas mayores en Yucatán, dijo que ha identificado que este sector de la población es muy vulnerable en varios aspectos y el económico no es la excepción. 

Debido a que en la mayoría de los casos hay poca familiarización con la tecnología, las personas adultas mayores recurren a los bancos, en donde el investigador dijo que también son estafados.

 Otra problemática más en el ámbito económico es que son privados de beneficios que por derecho les corresponden. 

“Por ejemplo, con las tarjetas de Bienestar 8 de cada 10 no disfrutan de sus becas porque las tarjetas se las quitan sus hijas, hijos, nietas o nietos y aunque supuestamente es un beneficio para ellos, no es así”, mencionó. 

Cabe señalar que la tarjeta de Bienestar es un plástico que poseen las personas beneficiarias de los programas del Gobierno Federal y cuenta con un abono económico o monetario mensual, bimestral según lo establecido en la ley. 

El investigador dijo que las personas adultas mayores que viven estas circunstancias muchas veces se enfrentan a la misma situación al recibir las pensiones como ex trabajadores. Generalmente, quienes son afectados con estas problemáticas no denuncian, ya que consideran que esto afectaría a sus familiares, resaltó Gamboa Cetina. 

“Está el caso de una señora a la que le quitaron estas dos tarjetas y le hicieron firmar una carta poder y aunque le contratan a una señora que le cocine cada tres días, ella no come porque está en depresión”, compartió. 

El investigador lamentó que esta no sea la única violencia que enfrentan las personas adultas mayores y además, hay unas que son más visibilizadas que otras como la negligencia en su medicación, pues hay quienes deben tomar medicamentos para atender diversas enfermedades y padecimientos y sus familiares pasan por alto sus horarios. 

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en Yucatán hay 265 mil 160 personas adultas mayores. (Foto de Lorenzo Hernández)