Un agente municipal no permitió que la mujer ingrese a ese municipio y la dejó abandonada en la carretera, argumentando que se trató de una medida para prevenir contagios de Covid-19. 

Por Herbeth Escalante

Mérida, Yucatán, 2 de junio de 2020.- En otro caso de abuso de poder, un elemento de la Policía Municipal de Peto bajó a una mujer de un autobús de pasajeros y la dejó abandonada en la carretera mientras caía una fuerte lluvia. Realizó esta acción ilegal con el supuesto argumento de prevenir contagios de Covid-19.

De acuerdo con testigos del hecho, el policía detuvo al camión de la línea Mayab en el “filtro sanitario” que está a varios kilómetros de la entrada del municipio y se subió a éste para exigirle a las y los pasajeros que les muestren su credencial de elector.

Su objetivo era impedir que ingresaran a Peto personas que no acreditaran ser residentes, ya que de acuerdo con el ayuntamiento de esa localidad, con esta medida se evita que foráneos contagien de coronavirus a la población.

Para mala fortuna de la mujer, no traía su identificación oficial y como su intención era llegar a ese municipio para tomar otro autobús hacia Cancún, Quintana Roo, el  policía no se lo permitió.

Es más, con un tono altanero, la obligó a bajarse de la unidad, a pesar de que estaba lloviendo. La dejó abandonada en la carretera estatal, a varios kilómetros de la entrada de esa localidad. 

Uno de los pasajeros logró captar el momento en que la mujer, resignada tras las amenazas del policía, acepta descender del autobús, no sin antes advertir que en caso de que pierda su transporte hacia Cancún, le exigiría al alcalde Edgar Calderón Sosa que le pague su pasaje.

Para colmo, el uniformado hostigó a otra pasajera para que le enseñara la galería de su teléfono celular, pues pensó que le había tomado fotografías o grabado en video cometiendo la mencionada arbitrariedad. 

El actuar del policía causó temor e indignación entre las y los usuarios del mencionado autobús, quienes no daban crédito que haya bajado a la mujer, de unos 50 años de edad, a pesar de que estaba cayendo la lluvia.  

Se averiguó que el hecho está siendo investigado por la Comisión de Derechos Humanos de Yucatán (Codhey), instancia que en reiteradas ocasiones ha solicitado a las autoridades municipales que no cometan actos de discriminación en sus filtros sanitarios, que no violenten los derechos de los ciudadanos y que no violen la Constitución mexicana.