Especialistas reconocen influencias de Uxmal y Chichén en la Casa del Pueblo

Como parte del Congreso Internacional de Arquitectura Indígena, realizaron un recorrido en la sede del PRI en Yucatán, que se caracteriza por su estilo neomaya
Por Redacción
Mérida, Yucatán, 3 de noviembre de. 2025.- En el marco del 2º Coloquio Internacional de Nueva Arquitectura Indígena en las Américas y el 1º Congreso Internacional de Arquitectura Indígena en las Américas, especialistas de España, Perú, Brasil, Chile, Argentina, Uruguay y varios estados del país, visitaron la Casa del Pueblo, sede del partido PRI, para conocer su arquitectura que da pie a ser considerada como monumento histórico y símbolo tangible del estado, que además tiene influencias de Uxmal y Chichén Itzá
El presidente del PRI en Yucatán, Gaspar Quintal Parra, señaló que ese edificio no es solo un monumento arquitectónico “es el faro de nuestra memoria, es un testigo fundamental de la cohesión social que dio origen al proyecto revolucionario en Yucatán y un recordatorio constante de la valentía de las Ligas de Resistencia”.
Dijo que esta obra materializó la promesa de la redención de la cultura maya, asegurando que los cimientos de la institucionalidad que hoy rigen al PRI estuvieran anclados en el orgullo de nuestro origen.
El grupo de visitantes estuvo coordinado por los maestros María Elena Torres Pérez, coordinadora del Congreso y José Guadalupe Huchin Herrera, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Yucatán.
En su visita señalaron la influencia y la relación de lugares como Uxmal y Chichén Itzá en la arquitectura neomaya con la fusión de elementos modernos con decoraciones en edificios emblemáticos, como el Parque de las Américas y la Casa del Pueblo, así como la preservación de edificios de estilo neomaya a pesar de los desafíos climáticos.
La Casa del Pueblo, cuya construcción arrancó en 1926 y fue solemnemente inaugurada el 1 de mayo de 1928, no es solo un edificio; es la obra cumbre que marcó la fundación de la identidad política moderna en la península. Es el testamento arquitectónico del Partido Socialista del Sureste (PSS), una pieza fundamental para que los yucatecos de hoy comprendan la profundidad de sus raíces históricas y su identidad política
Académicos y líderes institucionales coinciden: este Monumento Histórico es el símbolo tangible de nuestra transición política, un espacio que pasó de ser la sede central de la Liga Central de Resistencia a convertirse en la imagen de la fuerza organizada del pueblo. Fue diseñado por el arquitecto italiano Angel Bachini, pero su espíritu es profundamente yucateco, pensado para proyectar la monumentalidad y la autoridad de un nuevo régimen que ponía al pueblo en el centro.
Una Arquitectura Nacida del Sincretismo, Única en el Mundo
La Casa del Pueblo mezcla las referencias de los opulentos palacios franceses (neorrenacentista-barroco), un estilo que históricamente representó el poder central, con una riquísima decoración maya-tolteca..
El PSS impulsó esta estética redentora “un fenómeno conocido como la Vanguardia Vernácula Yucateca”, centrada en la reivindicación del arte maya prehispánico, estableciendo un diálogo directo con el glorioso pasado de la península.
El arquitecto Bachini decidió remeter la fachada, rompiendo el patrón neoclásico que dominaba el centro de Mérida. Esta ruptura urbana no fue casual; al crear una nueva plaza de cohesión política, se declaró la hegemonía de un nuevo poder nacido del pueblo, creando un espacio de encuentro que aún hoy nos pertenece.
“Hoy, como parte de la Zona de Monumentos Históricos decretada en 1982, tenemos el compromiso y el orgullo de garantizar que este legado, cargado de lucha y dignidad, siga siendo un patrimonio vivo y una fuente inagotable de orgullo para todas las futuras generaciones de yucatecos, recordándoles de dónde venimos y la fuerza que reside en nuestra identidad”, indicó Gaspar Quintal.








