Madres y padres de familia junto con las maestras de la escuela María Helena Chanes protestaron por la falta de luz y agua, problema que se viene arrastrando desde hace cinco años.

Sus hijas e hijas no cuentan con las condiciones adecuadas para tomar clases y, al ser ignorados por las autoridades, el plantel colapsó.

Por Herbeth Escalante

Mérida, Yucatán, 30 de agosto de 2022.- Madres y padres de familia junto con las maestras del kínder María Helena Chanes protestaron esta mañana porque el plantel no cuenta con electricidad ni agua potable, por lo que las y los 102 estudiantes no pueden tomar clases.

Afuera de la escuela, ubicada en la colonia Pensiones, lamentaron que la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado (Segey) no ha solucionado este problema, a pesar de que han exigido soluciones desde hace cinco años. De hecho, las niñas y los niños salieron del ciclo escolar pasado sin luz, y ayer que que regresaron a clases tampoco contaban con el servicio.

“Hace unos años vinieron y solo hicieron un remedio, pero la escuela ya colapsó, las instalaciones son muy viejas y necesitamos una solución”, declaró la directora del plantel, Hilda Yolanda Novelo Moreno.

Señaló que anoche llegaron al kínder personal del área de Planeación de la Segey para tratar de arreglar este problema y, al retirarse, había luz. Sin embargo, esta mañana los breaks estaban hacia abajo y no le notificaron a la directora si ya estaba restablecida la energía eléctrica al 100 por ciento.

“No puedo subir los breaks de luz sin saber si las instalaciones están en óptimas condiciones. Se supone que me iban a hablar para informarme, pero no lo hicieron, así que no pondré en riesgo a la niñez, pues puede haber un corto circuito”, explicó.

Ante la falta de electricidad durante tanto tiempo, los ventiladores y los aireas acondicionados no funcionan adecuadamente, además de que la planta de agua potable no puede utilizarse, por lo que las niñas y los niños no cuentan con el vital líquido.

“Necesitamos la luz para garantizar el bienestar y condiciones óptimas para que los alumnos puedan tomar clases”, insistió Novelo Moreno.

En la protesta, las madres, los padres y las docentes hicieron un llamado a las autoridades estatales para que doten de una planta eléctrica a la escuela María Helena Chanes.

En ese sentido, precisaron que han entregado varias solicitudes al secretario de Educación, Liborio Vidal Aguilar, y al gobernador Mauricio Vila Dosal, pero no han obtenido respuestas positivas.

“Los niños están sufriendo las consecuencia, pues salen todos sofocados y sedientos por el calor y el cansancio del cubrebocas. Por eso no vamos a traer a nuestros hijos a clases hasta que esto se solucione”, declaró una de las afectadas, la señora Susana Aranda.

Por cierto, durante la protesta señalaron que por falta de mantenimiento, los techos del plantel se esta cayendo, no cuentan con juegos infantiles y tampoco tienen un domo para protegerse del sol durante sus actividades físicas.

Cabe mencionar que el secretario Liborio Vidal informó ayer que cerca de 2 mil 200 planteles educativos en Yucatán presentan daños porque permanecieron cerrados durante la pandemia y por los impactos de las lluvias e inundaciones. Se trata del 63 por ciento de las escuelas.