Activista pidió empatía a la sociedad en estas fiestas decembrinas, pues por el ruido de la pirotecnia, las mascotas pueden presentar crisis nerviosas e infartos. Además,  en su desesperación llegan a romper puertas y ventanas o escalen muros para salir de casa, por lo que corren el riesgo de extraviarse o ser atropelladas.

Por Paloma Reyes

Mérida, Yucatán,  7 de diciembre. – La presidenta de la asociación Evolución Animal, Silvia Cortés Castillo, hizo un llamado a las autoridades para prohibir la venta de pirotecnia en Mérida, debido a los efectos negativos que ocasiona en las mascotas que son susceptibles a fuertes ruidos.

Ante el inicio de los festejos decembrinos, la activista por los derechos de los animales pidió empatía a la sociedad para evitar causar sufrimiento a perros y gatos, principalmente.

Puntualizó que el uso de pirotecnia también es un riesgo para las personas que la utilizan porque pueden sufrir quemaduras. Además, el estruendo que produce suele afectar a hombres y mujeres altamente sensibles, por lo que hizo hincapié en evitarla.

“No es prohibirle a nadie que no se divierta, es pedirle que por favor busque una opción distinta para que todos disfrutemos de esta temporada”, resaltó.

Cortés Castillo se manifestó a favor de que en el puerto de Progreso se haya prohibido la venta y uso de estos artefactos y mencionó que se encuentra a la espera del posicionamiento sobre este tema por parte del Ayuntamiento de Mérida.

Recordó que, por el ruido de la pirotecnia, las mascotas pueden presentar crisis nerviosas y en su desesperación llegan a romper puertas y ventanas o escalen muros para salir del sitio donde se encuentran. Esto puede derivar en lesiones o que el animal huya de su casa y se arriesgue a extraviarse o ser atropellado.

Por ello, recomendó a las personas que tengan animales de compañía, resguardarse con ellos y asegurar puertas y ventanas, así como ponerles música relajante o apoyarse del uso de vendajes especiales.

En caso de que la mascota corra riesgo de infarto, dijo que es conveniente consultar al médico veterinario para saber si se le puede administrar algún medicamento que los ayude a relajarse.