El Pass  President del Consejo Mundial de Ingenieros Civiles, Alfonso González Fernández aseguró que ese proyecto no tiene una justificación económica. “Esas obras no pueden estar basadas en ocurrencias y antojos”, recalcó.

Por Herbeth Escalante

Mérida, Yucatán, 27 de junio de 2019.- El Pass  President del Consejo Mundial de Ingenieros Civiles, Alfonso González Fernández, recalcó que el proyecto del nuevo aeropuerto de Mérida que se conectaría con el Tren Maya no está contemplado en el Plan Nacional de Desarrollo, por tal razón no cuenta con una justificación de inversión financiera.

El experto indicó que aunque este tipo de infraestructura son bien recibidas porque generan derrama económica y empleos, se requiere que estén soportadas por estudios verdaderamente serios para conocer su costo-beneficio.

En ese sentido, recalcó que proyectos de esa magnitud no pueden estar basadas en “ocurrencias y antojos” del gobierno.

“No podemos estar viviendo de ocurrencias, para eso existe el Plan Nacional de Desarrollo, pero ese aeropuerto no está considerado en dicho documento, sino está ¿de dónde va a salir?”, cuestionó.

Dijo que ese Plan sirve para alinear el crecimiento del país y para fondear los recursos para las grandes obras de infraestructura en base a ese rumbo, es decir, para que haya una justificación económica.

“Un aeropuerto no es una cosa menor, para su construcción se requieren protocolos internacionales, así como estudios avanzados sobre la navegación del espacio aéreo, rutas y viabilidades, no es algo que se pueda hacer en el corto plazo”, advirtió.

Además, González Fernández señaló que si la terminal aérea se pretende trasladar más al sur de Mérida hay que recordar que esa zona tiene restricciones ambientales, ya que ahí se encuentra la Reserva Ecológica de Cuxtal y una de las captaciones naturales de agua más importante de Yucatán.

“También se tiene que ver la tierra en la que se va disponer, pues para un aeropuerto se requieren por lo menos 300 hectáreas y no sabemos si existe ese espacio en la zona conurbada de Mérida con Kanasín y Umán”, explicó.

El ingeniero enfatizó que el nuevo aeropuerto que se pretende levantar  “no puede ser una isla”, por lo que se requiere conocer cuáles y dónde estarán las vialidades con las que se conectará.

González Fernández agregó que el actual aeropuerto Internacional de Mérida funciona adecuadamente, está bien ubicado y todavía no llega a los limites de su capacidades. Además tiene espacio para una futura ampliación con nuevas salas de abordaje.