Sociedad civil y autoridades se unieron para ubicar al sujeto, quien se robaba las aves de sus nidos en vida silvestre. 

Por Claudia Arriaga

Mérida, Yucatán, 11 de junio de 2020.- La asociación civil Proyecto Santa María dio a conocer la aprehensión de una persona dedicada al comercio ilegal de loros en Tizimín. Desde mayo, denunció que se estaba cometiendo dicho delito, pero ahora, en colaboración con las autoridades, lograron que se detenga a ese traficante de aves.

La agrupación señaló que ese hombre se robaba a los loros de sus nidos en vida silvestre, lo que es algo verdaderamente cruel, tomando en cuenta que la mayoría de esos ejemplares muere en el proceso. 

“Este sujeto (se reserva información por razones legales) sin duda hizo mucho daño a la vida silvestre, pues se documentó su ilícita y cruel actividad durante mucho tiempo”, publicó Proyecto Santa María en sus redes sociales.

También se congratuló de que las autoridades están logrando desarticular a grupos dedicados al comercio de la vida silvestre, incluyendo especies protegidas, “pues por años ha sido un jugoso y cruel negocio”.

La directora de Proyecto Santa María, Vanessa Martínez García, explicó que desde 2011 se encuentran trabajando en la conservación de las aves y su hábitat, y que durante este tiempo han detectado que cada vez son más frecuentes los delitos de tráfico de ejemplares. “En este año hemos tenido un incremento de las denuncias ciudadanas en nuestra página”, señaló.

Fue así que lograron ubicar al traficante de Tizimín,  por lo que se realizó un trabajo coordinado con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), así como las Secretarías de Desarrollo Sustentable (SDS) y de Seguridad Pública (SSP).

La agrupación también  ha identificado que las redes de tráfico operan en Facebook o grupos de WhatsApp, y que incluso envían a las aves por paquetería. Esta situación revela lo difícil que sería combatir los delitos sin el apoyo de la ciudadanía.

Luchan contra la caza de aves

De igual forma, Proyecto Santa María trabaja para la erradicación de la cacería y venta ilegal de aves, tarea complicada, pues algunas personas se excusan en los usos y costumbres de la región para cometer estos delitos.

“Es una herencia que ha pasado de generación en generación; sin embargo, la venta ilegal de fauna silvestre no debería encontrarse dentro de los usos y costumbres de ninguna comunidad”, detalló Vanessa.

La belleza del plumaje de las aves también influye para que en la actualidad muchas personas de Mérida y sus comunidades las adquieran como mascotas, sin conocer los riesgos que representa para éstas.

Entre las aves que más se cotizan en el mercado ilegal están los loros, azulejos, cardenales y mariposos, por mencionar a algunos. La mayoría está bajo una categoría de riesgo por la Norma 059 de la Semarnat, porque están en peligro de extinción o amenazadas.

Cabe mencionar que, producto de las denuncias que ha realizado Proyecto Santa María ante la Profepa, se creó un comité de vigilancia ambiental formado por ciudadanos voluntarios en distintos puntos de Yucatán.

La organización también trabajó en el rescate de una lechuza que fue atacada en Timucuy, pues hubo gente que la consideró de “mal agüero”, y se sumó a la denuncia en contra de la persona que mató al tucán “Tukis” en Francisco de Montejo.