El animal fue encontrado en estado famélico, sin un ojo y con una llaga infectada en el rostro. El supuesto dueño aseguró que lo venderá como “comida” para cocodrilos en Tekax.

Por Claudia Arriaga

Mérida, Yucatán, 29 de julio del 2020.-Un caballo en estado famélico que presentaba diversas lesiones, deambulaba en las calles de Tekax hasta que se refugió durante un tiempo en la casa de Olga Sugey Quiñones Martín. Eran alrededor de las 10 de la noche cuando el animal ingresó al predio y la mujer pudo constatar el maltrato que ha sufrido, pues no cuenta con un ojo y tiene una llaga en estado de putrefacción. 

Olga resguardó al caballo durante poco más de una hora, tiempo que aprovechó para evidenciar las agresiones que ha vivido. “El caballito llegó de la nada, lo acogí en mi casa, lo vi lastimado y solo, estuve averiguando y varios vecinos que viven enfrente de la ganadera dicen que está abandonado, lleva varios días en sol y lluvia, sin agua”, relató.

También el  otro ojo presenta una lesión y  tiene una “llaga de verano” infectada en el rostro, herida que se produce por una prolongada exposición al sol. Olga planeaba adoptar al caballo, pero un hombre en estado de ebriedad acudió al domicilio a exigir que le regrese el animal.

“Me enfrenté con él y le dije que no se lo quiero entregar, pero me respondió que me enviaría a la policía y me amenazó. Me dio mucho miedo que me haga algo y tenía aliento alcohólico. Además, tengo una grabación en la que dice que el caballo será sacrificado y que no dará ni un peso porque él lo compró”, abundó.

Olga cree que el caballo pudo haber sido utilizado en los torneos de lazo o que el sujeto lo robó. A pesar del miedo, está dispuesta a interponer una denuncia y espera contar con el apoyo de las asociaciones de protección animal y del  Ayuntamiento de Tekax, ya que este sería el quinto caso de maltrato animal que ocurre en el municipio en los últimos días.

Por cierto,  durante la discusión, el presunto dueño del caballo aseguró que lo llevaría al Centro de Conservación de Vida Silvestre “San Bartolomé Tekax” de la Semarnat para venderlo como alimento para los cocodrilos.

Cabe mencionar que no es la primera ocasión que Olga participa en un rescate. Ella es la cuidadora actual de Manchitas (Patitas), un perrito mestizo que fue violado hace unas semanas. El can se ha recuperado con éxito del ataque y aunque al principio fue difícil ganarse su confianza, ya juega de nuevo con las personas:

“Cuando lo rescatamos tenía mucho miedo, no se quería acercar, como que estaba agresivo. En una ocasión cuando mi esposo lo fue a criar se pegó a la pared por el temor. Ahora ya no, ya lo soltamos , ya corre y juega”, comentó.