Durante más de un año ha sido hostigada por un vecino, quien ya amenazó con hacerle daño a su hija.

Tiene testigos, videos, fotos e incluso reportes ante la Policía, pero el acoso sigue y ahora es más agresivo. 

Por Claudia Arriaga

Mérida, Yucatán, 7 de septiembre de 2020.– Marcela Sánchez Moguel lleva más de un año siendo acosada por su vecino Sergio Arnulfo H.S. en el fraccionamiento Paseo de las Fuentes. Tiene testigos, videos, fotografías e, incluso, en varias ocasiones la Policía Estatal acudió para tomar parte de los hechos, pero de poco sirvió. Los uniformados le pidieron que reuniera firmas que acrediten los hechos para que  la Fiscalía General del Estado (FGE) acepte su denuncia.

La joven tiene miedo, ya no puede salir de su vivienda y además el acosador la amenazó con hacerle daño a su hija de cinco años edad. “En una de esas, me dijo, que si no le  hacía caso e iba a su casa que me cuidara y cuidara a mi hija, que se la podría llevar. Tengo miedo, él se escuda con que no tiene una pierna y la fuerza para hacer esto, pero se lleva con gente a la que podría pagarle, sabe que estamos solas”, explicó. 

El acoso en contra de Marcela fue escalando de agresividad desde hace un año y medio, primero era verbal y luego subió a  amenazas. Pero antes que ella, su  hermanita vivió en la misma casa y también era hostigada por Sergio; de hecho, esa vez,  el papá de las jóvenes habló con él para que se detuviera. 

Fue a partir del confinamiento de la pandemia que las cosas resultaron peores para esta joven madre. El 28 de marzo le dejó unas rosas en la puerta de su casa y para el Día de San Valentín también le envió regalos. Marcela siempre ha sido muy clara y no acepta sus invitaciones.

“ Tiré todo a la basura, yo le huía y como supo que me quedé sola, venía a mi casa y yo no quería salir, me intentaba invitar a comer, cenar y que le de mi número. Yo no quería ni salir a la terraza. Le pedí que me dejara de faltar al respeto delante de mi hija”, relató.

En otro incidente, Marcela grabó cómo fue acosada y llamó al número de emergencias  911. Elementos policiacos acudieron al llamado, pero él lo negó todo. “La Policía me dijo que no fuera a perder mi tiempo a la Fiscalía porque necesitaban pruebas reales y con todo y los vecinos de testigo no iba a proceder, sólo que si pasa algo peor que les avise”, agregó.

Marcela tiene cámaras en su domicilio y ha tapizado el frente de su casa porque el acosador intenta grabarla. De hecho, el jueves pasado, ella salió un momento y cuando regresó, se encontró con que dicho sujeto le pidió su número al repartidor de comida, quien por fortuna no cedió ante la insistencia.

La situación que vive la joven la ha denunciado en redes sociales y para su sorpresa, otras mujeres manifestaron haber sido acosadas por el mismo hombre. Marcela juntó firmas  y denunciará ante la Fiscalía el acoso que la mantiene prisionera en su propia casa y con temor de un mayor ataque. 

Cabe mencionar que de acuerdo con los datos de la Incidencia Delictiva y Llamadas de Emergencia 9-1-1 del Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Pública, Yucatán se ubica en el lugar 15 de reportes por acoso y hostigamiento sexual, y está sólo a uno por ciento de alcanzar la media nacional, que es del 3.7.

Como Marcela, cientos de mujeres en Yucatán han denunciado diferentes formas de acoso y hostigamiento, pero desafortunadamente,  de poco sirve si la propia autoridad desestima los casos por la falta de flagrancia.