Proponen que la reforma se aplique de manera gradual para que no haya una afectación tan agresiva para las pensiones de los burócratas actuales

Por Herbeth Escalante

Mérida, Yucatán, 29 de junio de 2022.- Durante una nueva reunión de trabajo entre diputados e integrantes del Comité de Expertos que buscan solucionar el problema financiero del Isstey, el actuario Roberto Díaz García declaró que es necesaria una reforma a la ley actual para tener un nuevo esquema de pensiones, pero que ésta tiene que aplicarse de manera gradual “para que no sea tan agresiva y la medicina no sea tan amarga”

En su intervención, dijo que una solución sería cambiar el modelo a cuentas individuales, para que las nuevas generaciones de trabajadores reciban una pensión acorde a lo que coticen, como sucede con las afores del IMSS o el Isste. En ese punto, precisó que en la ley se tendría que definir cuánto deben aportar, durante cuánto tiempo, la edad de jubilación y el interés real que va a generar a partir de los mercados internacionales.

La otra propuesta es conservar el modelo actual de beneficio definido, en el que la pensión está garantizada para todos los burócratas, pero cambiando los parámetros para acceder a éstas, como incrementar los años de cotización, establecer una nueva edad de retiro o hasta cambiar los topes actuales de pensión, entre otras. 

Sobre el esquema de cuentas individuales, el actuario indicó que la ventaja es que ya no habría déficit en el sistema del Isstey, pues a partir del dinero que junten los trabajadores “podrán comprar su pensión”. Eso sí, si generan más rendimiento, su pensión será mayor, si generan menos rendimiento, ésta podría no ser suficiente al jubilarse. 

Ante los legisladores de la Comisión Especial de Atención al Isstey, Díaz García enfatizó que es necesario hacer una reforma a la ley para poder garantizar financieramente que los trabajadores del Estado recibirán su pensión y así evitar que la dependencia quiebre.

En ese sentido abundó que las personas que ya están jubiladas o que ya están en edad de jubilarse, no perderán sus derechos adquiridos y seguirán conservando sus pensiones como hasta ahora; pero a aquellos que les falte, aunque sea un día, podrían verse afectados.

Por tal razón, recalcó que el nuevo sistema de pensiones debe aplicarse de manera gradual, para perjudicar lo menos posible a quienes les falte poco tiempo para jubilarse. De hecho precisó que ellos tienen expectativas de derechos, no derechos adquiridos.

Mientras que las nuevas generaciones de trabajadores tendrán que estar sujetos al nuevo esquema, pues ya se comprobó que el actual no es viable. 

El actuario insistió que el nuevo sistema tiene que aplicarse de manera gradual para que la solución al problema financiero del Isstey no sea tan agresiva, es decir, que la medicina no sea tan amarga.

Por último, señaló que se tiene que garantizar que reciba pensión quien deba tener pensión, y que sí puede trabajar, que siga trabajando (sic.)

En la reunión, los diputados leyeron las propuestas  y sugerencias recabadas entre los sindicatos para reformar la ley, así como los comentarios hechos en un micrositio de internet.

Por cierto, en el encuentro, una de las integrantes del Comité de Expertos, Elsy Mezo Palma, declaró que están haciendo propuestas para tener un “traje a la medida” para solucionar los problemas del Isstey. En respuesta, el diputado del PRD, Eduardo Sobrino Sierra, indicó que hay que ver que  ese traje no se quede “en un pantalón corto o en un chalequito”.