La joven sufrió distintos tipos de violencia en la empresa por parte de sus compañeros y superiores.

Por Redacción

Mérida, Yucatán, 6 de septiembre de 2022.-Una extrabajadora de la empresa de pastelería y repostería Tere Cazola denunció haber renunciado debido a situaciones de acoso, violencia digital y abuso de poder que sufrió por parte de los supervisores de dicha compañía.

La joven estudiante identificada como A. G., relató a Haz Ruido que laboró para dicha empresa durante dos años y medio, tiempo en el cuál fue víctima de acoso por parte de los supervisores y jefes de área, e incluso en una ocasión llegaron a circular imágenes íntimas suyas sin su consentimiento entre los trabajadores.

Explicó que a los primeros 6 meses de haber ingresado a la compañía en el área de Call Center, ocurrió la difusión de las fotografías y al reportar el hecho, lo único que hicieron fue cambiarla de área.

“Después, un compañero me tocó de manera inapropiada en frente de uno de estos supervisores, pero por tener una relación de amistad con él, no hicieron nada. La única sanción que tuvo esa persona fue una suspensión mínima y me hicieron continuar trabajando con él por meses”, declaró y precisó que esto sucedió cuando se desempeñaba como cajera en una de las sucursales de dicha pastelería.

Asimismo, A.G. dijo que también sus superiores abusaron de su poder al enviarle mensajes fuera del horario de trabajo con el propósito de ofrecerle un mejor puesto a cambio de “algo más”. 

La mujer detalló que estos empleados también ejecutan conductas inapropiadas con las demás trabajadoras de la empresa, como tocamientos lascivos y expresiones denigrantes.

“Cuando firmas el contrato te dicen claramente que no puedes relacionarte con ningún empleado, pero se relacionan. Son señores de 40 años metiéndose con chavitas de 20 años o más chicas”, señaló.

Eso sí, la joven indicó que, una vez presentada su renuncia ante la empresa, acudió a la Fiscalía General del Estado (FGE) e interpuso una denuncia formal por los hechos, que fue asentada en el acta GP/001812/2022, por lo que se encuentra a la espera de los avances de la investigación.

De igual manera, la estudiante dijo que fue contactada por sus excompañeras, quienes le informaron que dichos empleados seguían buscándola en redes sociales con el propósito de recabar fotografías para intentar amenazarla.

“Es preocupante que pase algo así, debería haber un acercamiento dentro de estas grandes empresas que contratan a jovencitas, con organizaciones y asociaciones feministas para seguir evitando que todo esto ocurra. No puede estar pasando esto dentro de una empresa tan importante donde su imagen es una mujer que presume de apoyar a las mujeres y de ser un lugar seguro para ellas”, finalizó.