Inició la jornada de elección interna con reclamos de militantes a su presidente, Carlos Sobrino, porque no dejan votar a varios militantes. Ramírez Marín pide que no haya trampas.

Por Herbeth Escalante y Óscar Rodríguez.

Mérida, Yucatán, 7 de abril de 2019.- Luego de una campaña interna ríspida y confrontaciones entre los candidatos Francisco Torres Rivas y Diego Lugo Interián, este domingo inició la jornada para elegir al nuevo dirigente del PRI en Yucatán, entre quejas e inconformidad por la mala organización, ya que no aparecen militantes en el padrón de votación.

Justo cuando el actual presidente del partido, Carlos Sobrino Argáez, ofrecía una entrevista a representantes de medios de comunicación, luego de sufragar en un local de la colonia Leandro Valle, se le acercaron mujeres y hombres a reclamarle que no se encontraban en la lista, a pesar de que sí se afiliaron.

“No aparezco en la lista, ¿cómo lo puedo solucionar?”, lo increpó una mujer y enseguida más gente empezó a recriminarle.

Le reprocharon que llegaron al lugar para votar por el candidato de su preferencia y que incluso “llevaron gente”, pero para su  sorpresa les comunicaron que no estaban en el registro. “Así vamos a perder, vale sorbete”, exclamó otra militante.

Sobrino Argáez se lavó las manos diciendo que la lista la envió el Comité Ejecutivo Nacional y que no podía hacer nada para solucionar el conflicto, “yo no la hice, no depende de mí, no les puedo ayudar”.

Ante su negativa, las y los inconformes se quejaron de que la directiva del PRI les haga a un lado y que no tienen ninguna “esperanza” de participar en este proceso interno, por lo que mejor se cambiarán de partido.

Para esta elección, supuestamente tienen derecho a participar 191 mil personas afiliadas añ tricolor, por lo que se instalaron casillas en los 106 municipios yucatecos. Podrán seleccionar a su nuevo presidente de partido entre el exdiputado Torres Rivas y el alcalde de Sucilá, Lugo Interián.

Durante estas semanas de campaña se evidenciaron las diferencias entre ambos aspirantes, quienes se acusaron de jugar sucio y hubo difamaciones mutuas, situación que polarizó el proceso interno.

Hubo impugnaciones de candidaturas, acusaciones de traición y abandono a la militancia, debates incómodos, descalificaciones personales y hasta denuncia por violencia política de género, factores que, junto con la mala organización de la jornada electoral de este domingo, podrían hundir más al PRI luego de los negativos resultados de los comicios de 2018.

Por lo pronto, los otros dos candidatos que se inscribieron, Eloy Quiroz y Francisco Sulub, declinaron a favor de Diego Lugo, pero de todos modos sus nombres aparecen en las boletas. Como reununciaron formalmente a sus candidaturas, los votos que reciban serán anulados.

Antes de celebrarse la jornada electoral, Torres Rivas se quejó de que no se instalaron urnas suficientes en Mérida, lo que podría provocar que las y los militantes que viven en las comisarías o zonas lejanas no acudan a sufragar.

Mala organización y sospecha de trampas

El senador del PRI, Jorge Carlos Ramírez Marín, denunció que han detectado irregularidades en esta jornada, como el hecho de que varios militantes no aparecen en el padrón, lo que arroja que hay una mala organización por parte del partido. Responsabilizó de estas inconsistencias a la dirigencia que encabeza Carlos Sobrino.

Por ejemplo, citó que su esposa María Elena Granados no está en la lista, así como otros líderes del tricolor, por lo que no pudieron sufragar. “En el PRI nos sobra militancia, pero hace falta dirigencia”, enfatizó.

Indicó que espera que la jornada electoral se lleve a cabo en orden y sin trampas, aunque tiene información de que en algunos lugares hay intentos deliberados de entorpecer y hacer más lenta la votación.

“El PRI debe considerar seriamente que si de verdad quiere ser el ejemplo para la sociedad, tiene que preocuparse de que sea una jornada limpia, transparente y echar para atrás a esos jugadores que mandó a hacer un juego sesgado”, sostuvo.

Ramírez Marín hizo un llamado a la dirigencia del tricolor a que asuma su responsabilidad y propicie una elección transparente “y que entre nosotros no nos hagamos trampa”.

Recalcó que hay una mala organización, lo que genera inconformidades y molestias en los centros de votación, por lo que subrayó que espera que no haya trampas.