Lamentan que Vila Dosal esté pagando favores políticos.

Por Redacción.

Mérida, Yucatán, 25 de enero de 2019.- Afectadas por el fraude de Crecicuentas protestaron en contra del nombramiento de la expresidenta del Congreso del Estado, Celia Rivas Rodríguez, como titular del Registro Civil y criticaron que el gobernador Mauricio Vila Dosal la haya colocado en ese puesto sólo para pagar favores políticos

A menos de una semana de la designación, se manifestaron por segunda vez para exigir su destitución. Un grupo de aproximadamente 20 personas defraudadas por Crecicuentas solicitaron al mandatario que Rivas Rodríguez sea removida de sus funciones, ya que durante su trabajo como fiscal General, en la administración del priista Rolando Zapata Bello, impidió su acceso a la justicia y la resolución del caso.

La activista y representante del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio en Yucatán, Adelaida Salas Salazar, calificó como violencia institucional la omisión de las autoridades ante las peticiones de las mujeres de la tercera edad despojadas de sus recursos.

“Esta es una clase de violencia institucional que hasta ahorita no está tipificada como para poder meterla a la cárcel, es únicamente el dolor de las mujeres que invirtieron sus ahorros, nadie les hace caso”, declaró.

La activista acusó a Vila Dosal de pagar favores políticos para colocar a la priista y de ejercer violencia política en las instituciones. “¿Que favores políticos está pagando Vila? Él no sufre, es la ciudadanía que con impuestos pagamos sus viajes. Es un bueno momento para que el gobernador deje de viajar y se dedique a su Estado”, puntualizó.

Salas Salazar dijo que la intención era dialogar con Rivas Rodríguez, ya que sus expedientes no aparecen. “Las señoras querían hablar con Celia porque sus expedientes no aparecen, pero se encerró y no quiso dar la cara”, expuso.

Las manifestantes señalaron que, como parte de la protesta, originalmente no permitirían el acceso al Registro Civil; sin embargo, a las 7 de la mañana  que llegaron al sitio, ya había una larga fila esperando para realizar algún trámite, por lo que decidieron cerrar de manera simbólica una de las calles de la oficialía.

Cabe recordar que en 2011, más de 200 personas fueron defraudadas por la caja de ahorro Crecicuentas por un monto que supera los 800 millones de pesos.