Claudia fue la primera mujer transgénero en participar en un proceso electoral en la entidad y, aseguró, no está peleada con los partidos, por lo que competiría de nuevo.

Hay que luchar en política  para obtener un mayor reconocimiento de los derechos de la comunidad LGBTQ+, señaló. 

Por Claudia Arriaga

Mérida, Yucatán, 22 de enero de 2020.- En las elecciones de 2018, Claudia Débora Segura Trueba fue la primera mujer transgénero de Yucatán en formar parte de una planilla de aspirantes a regidores, en esa ocasión, por el cabildo de Mérida. Pese a que se trató de un primer paso en el que la comunidad LGBTQ+ tuvo la oportunidad de participar en un proceso democrático, sólo pudo competir con su identidad masculina.

En entrevista, confesó que anhela cambiar sus documentos oficiales, pero su sueño es hacerlo en la tierra que la vio nacer. Confía en que las y los diputados yucatecos legislarán para dotar de más derechos al sector de la población al que pertenece, incluyendo aprobar la reforma pendiente a la Ley de Registro Civil, para que en el estado se puedan realizar cambios de nombre y género en las actas de nacimiento.

“Para irme a la Ciudad de México y pagarlo, prefiero hacerlo en mi tierra de origen. La vida te da sorpresas y tenemos la esperanza de que se logre algún día, lo último que debe morir es la esperanza, esperemos a ver qué pasará”, señaló.

Fue gracias a su amiga Ofelia Morales que inició su camino en la vida política, incluso fue presidenta de la comisión mixta del partido donde militaba y ahí surgió la oportunidad de aspirar a ser regidora. “Siempre he apoyado a la comunidad lésbico-gay, en la comisión preparamos a más personas para que apoyen a otros”, explicó Claudia. 

Pese a que en la primera ocasión no obtuvo los resultados deseados, admitió que volvería a intentarlo. “Tampoco estoy peleada con los partidos políticos, si me dieran la oportunidad lo haría de nuevo, al final todo será para la comunidad, no para mí porque cuando me muera nada me llevaré”, dijo.

Su lucha es por obtener un mayor reconocimiento de derechos para la comunidad LGBTQ+ , ya que, precisó, tuvo que pasar mucho tiempo para que la sociedad empezara a respetarla.  

Pero el trabajo de Claudia no únicamente es político, también formó la agrupación Mujeres Trans Empoderadas junto con sus amigas, con el único objetivo de ayudar a quienes más lo necesitan.

A sus 61 años de edad, reconoce que no le tocó un camino fácil. Los arrestos injustificados y las persecuciones de los policías en el Centro Histórico de Mérida son ahora parte de su pasado.

También quedó atrás el rechazo de su propia familia y las palizas que le propinaban sus hermanos para “curarlo”, hechos que le marcaron su vida.

“Para comenzar, enfrentarse con la familia. Nací en un núcleo familiar muy machista, crecí con puros hermanos y mi papá era muy machista. Los hermanos te quieren componer a base de gritos, golpes, ofensas y comienza un calvario”, recordó.

Son varias las transiciones que ha vivido y aunque siempre supo qué quería, también se enamoró y contrajo matrimonio con una mujer. “Yo me enamoré de mi esposa, no como muchos que dicen que se casan por taparle el ojo al macho, de que hubo amor y cariño lo hubo, tanto que hasta el día de hoy nos seguimos llevando” confesó. 

Producto de ese matrimonio que duró apenas cuatro años, tiene una hija y nietas con las que convive actualmente.

Otros casos

Cabe mencionar que, en la Península de Yucatán, sólo el estado de Campeche registró una candidata transgénero. Se trata de Samara Aguilar Calderón, quien en los comicios del 2018 fue presentada como precandidata al XII distrito –Sabancuy- por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).